Si tienes un router antiguo, sí que puede ser interesante reiniciarlo más frecuentemente. Esto no es algo que hoy en día sea necesario si cuentas con un dispositivo actual, de fibra óptica, pero sí que era más necesario con routers antiguos de ADSL. No obstante, aun así hay situaciones en las que puede ser positivo.
El router puede pasar meses encendido
Lo primero que hay que tener en cuenta, es que el router es un dispositivo diseñado para permanecer durante semanas y meses encendido. En principio no debería haber problemas y podrías conectarte con normalidad, tener conexión tanto por cable como por Wi-Fi, sin necesidad de apagarlo de vez en cuando.
A diferencia de otros equipos, en este caso no vamos a tener problemas para que funcione bien. Es un dispositivo que va a consumir muy poca energía. Está pensado justo para eso, para que lo tengamos en nuestro hogar, conectado durante semanas sin pensar en apagarlo.
Pero eso no significa que en determinadas circunstancias sea bueno reiniciar el router de vez en cuando. Puede ayudar a solucionar ciertos errores, como por ejemplo que la conexión se sature y empiece a ir mal. Dependerá mucho del modelo de router que tengamos, del uso que le demos, etc.
¿Cuándo conviene apagar el router?
Si nuestro router es algo antiguo, sí que puede ser interesante reiniciarlo más frecuentemente. Esto no es algo que hoy en día sea necesario si cuentas con un dispositivo actual, de fibra óptica, pero sí que era necesario con routers antiguos de ADSL. No obstante, aun así hay situaciones en las que puede ser conveniente.
Porque está saturado
La primera razón por la cual deberías reiniciar tu router de vez en cuando es por saturación. Aunque están diseñados para administrar múltiples conexiones como ordenadores, móviles o televisiones, a veces pueden saturarse y no dar una respuesta adecuada.
Algo que podemos hacer para solucionar el problema es simplemente apagar el router y volver a encenderlo. Con el reinicio del dispositivo, se reinician los procesos del sistema y podemos solucionar ciertos errores, como quedarse colgados algunos procesos.
Cambiar la IP o una actualización
Otra razón para reiniciar el router, es si queremos cambiar la dirección IP. Según la compañía que tengamos, suele ser necesario apagar el router y tenerlo así unos minutos para, posteriormente, volver a encenderlo. De esta forma va a recibir otra dirección IP distinta. En ocasiones puede ocurrir una vez al mes, aunque por seguridad creo que deberíamos cambiar la IP al menos una vez a la semana.
Puede ser necesario reiniciarlo también, cuando ha recibido alguna actualización el router. De esta forma los cambios se aplican correctamente y podemos ver que mejora la seguridad o el funcionamiento. Puede ser necesario en la mayoría de ocasiones, el router puede que no nos avise y por lo tanto, no nos enteraríamos. Por ello, apagándolo forzaremos esa actualización.
Vas a estar tiempo fuera
Una razón más para apagar el router, es cuando vayas a pasar tiempo fuera. Un motivo que puedes pensar es el ahorro energético. Tiene sentido, ya que aunque este tipo de dispositivo consume muy poco, si vas a estar varias semanas o meses fuera no tiene mucho sentido que esté encendido.
Pero la otra razón para apagarlo si estás fuera, es por seguridad, debido a que los piratas informáticos van a tener más tiempo disponible para lanzar ataques y pruebas para intentar romper la clave del Wi-Fi y acceder. Si apagas el dispositivo, evitarás este tipo de problema.
Como ves en determinadas ocasiones puede ser interesante apagar el router. No es algo necesario en líneas generales, pero en determinadas circunstancias podría ser aconsejable para evitar ciertos problemas que puedan aparecer. Eso sí, es importante reiniciar el router correctamente.